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Lo primero que hice al llegar a casa fue coger un metro y medirme el pene, estaba empalmado solo por la situación, que era realmente ridícula aunque para mi excitante, 17 cm, no 21, que desastre, desde donde se mide el pene? Yo tomaba buena nota de las experiencias de mis nuevas amigas, en ocasiones tenia que ir al baño para aliviar la tensión, ya me entendéis, era verdaderamente excitante oír sus aventuras. Es muy especial dijo Marta, no tiene nada que ver, un fecha me gustaría poder disfrutar de un hombre y una mujer al mismo tiempo, debe ser lo mas. Llego el ansiado día, como era corriente llegue a las 8 y Olga aun no estaba. Marta llevaba un vestido de raso estampado con sandalias de tacón, yo llevaba vaqueros y camiseta blanca con chanclas playeras, nos sentamos en el salón, Marta no parecía nerviosa y me pregunto como me encontraba. Marta puso su baza en mi cintura y la deslizo suavemente hasta dejarla sobre mi nabo y lo agarro por encima del pantalón, creo que lo pasaremos perfectamente dijo, y me beso dulcemente acariciando mis labios con su lengua. Apreciar mis luces, ambos nos reímos recordando las bromas de la oficina, apretó el broche azul y el sujetador se aparto de su cuerpo, no pude retirar la vista, el tiempo se detuvo, sus pechos eran bastante grandes, pero firmes, sus pezones estaban ligeramente inclinados hacia arriba y eran grandes, Olga las tomo con sus manos y nos los ofreció, Marta se levantó y los acarició, sus manos no podían contener el volumen. Olga se agacho y desabrocho mi pantalón, yo permanecía inmóvil, sus tetas no se despegaron ni un cm de su cuerpo al inclinarse, instintivamente cogi una de ellas y acaricie con firmeza, eran mas duras de lo que yo al menos acostumbraba a ver y tocar, sus pezones estaban muy muy duros y eran prominentes, cuando desperté del sueño habían sacado mi pantalón y mi niqui y estaba sentado frente a dos diosas casi desnudas frente a mi. A los pocos segundos Olga estaba tanto o mas cachonda que antiguamente, me retiro la cabeza nos besamos y me tumbaron en el butacón, Marta separó sus piernas y se situó sobre mi cara abrió los labios vaginales y comenzó a masturbarse sobre mi, rozando su coño con mis labios, lengua… Ahhh si sigue así por favor chupa mi concha cabrón, cómeme el chocho, al principio me sorprendió, pero viendo como se ponía Marta la deje hacer.
Tampoco tenía ganas de beber ni de alternar. La mascarilla me las hacía pasar putas. Era un bar alguien de un lugar cualquiera. Solo había una mujer sentada a una banco. Me senté en otra mesa, guardando la distancia. Vino la camarera, una veinteañera rubia, de ojos azules, bella y con un cuerpazo, pedí y al ratito me sirvió un gin tonic. La mujer de la banco de al lado andaría en los cuarenta años de edad. Tenía los codos apoyados en la mesa y parecía estar adorando a su alcohol. Levantó la vista, me miró y al ver que la estaba mirando, me dijo: -No quiero que me invites a nada.
Prefieren a los chicos guapos y de guedeja bruno, empero también la colectividad de las mujeres dicen que su macho óptimo déficit anatomía bastante respetuoso y caballeresco, y no les importa abundante si son blonde o no. Las mujeres, women. O girls, son a veces un algo selectivas. Muchas de. Ellas dicen que lo anterior en lo que se fijan en el edad de admirar a un macho por primera tiempo, es en su aspecto físico. Admirar como. Cada macho luce.